Hoy entrevistamos a Roberto Lacasta, arquitecto que ha diseñado los dos proyectos inmobiliarios que actualmente estamos desarrollando en Zaragoza, Coanfi Residencial Arquerías y Coanfi Residencial Magna.

Roberto es socio de A4 Arquitectos desde hace más de 16 años, despacho que ha ejecutado proyectos multidisciplinares como las instalaciones deportivas del Pabellón Príncipe Felipe o el Centro deportivo Siglo XXI, hospitales como el Complejo Hospitalario de ASVE, edificios educativos como la sede de la Universidad Europea de Madrid en Alcobendas, y grandes centros comerciales como el Centro Comercial Augusta, así como multitud de viviendas y diversos desarrollos urbanísticos.

. ¿En un despacho de trayectoria consolidada como el vuestro, cómo integráis la innovación y la implantación de las últimas tecnologías del ámbito de la Arquitectura y del sector de la vivienda?

En un despacho con una trayectoria de más de 50 años, la implantación de las nuevas tecnologías ha sido una constante, desde los grafos, los vegetales y las plantillas de los años 70-80 a la implantación del Autocad en los años 90, siendo uno de los pioneros a nivel español, y por último el salto a la tecnología BIM realizado ya hace casi una década.

Estar al tanto de las últimas tecnologías en nuestro campo nos permite acceder a un segmento del mercado más cualificado, tanto en lo que respecta a nuestros clientes, que se benefician de un desarrollo más completo de sus proyectos, como de las personas que colaboran con nosotros, que requieren una formación mucho más especializada.

Todo esto nos da como resultado proyectos mucho más definidos, una mayor eficiencia en los plazos de desarrollo y  un mejor control del presupuesto de ejecución.

 . ¿Cómo valoras en el diseño de viviendas el papel de los arquitectos participando en entornos colaborativos junto con empresas como Coanfi, que integran la promoción y la construcción? ¿Hacia dónde crees que se encamina el sector en estas cuestiones?

Desde la crisis del 2012 el sector inmobiliario ha sufrido una gran transformación, tanto en los sistemas de producción, como en las estructuras internas de la promoción.

Pese a que la Ley de Ordenación de la Edificación sigue marcando como agentes independientes al Promotor, Proyectista, Constructor, Director de Obra, Director de ejecución de obra, etc., asignándoles funciones perfectamente definidas sin vinculaciones directas entre ellos, la evolución del mercado inmobiliario desde el 2012 hace que esta estructura se haya quedado atrasada y con muy pocas probabilidades de éxito.

En estos momentos, todos los grandes desarrollos urbanísticos se realizan mediante un sistema colaborativo, donde gran parte del éxito radica en la colaboración directa  entre promotor, constructor y proyectistas desde las primeras etapas de la promoción. Cuando se trabaja en este tipo de entornos el porcentaje de éxito de la promoción es muy elevado.

Empresas como COANFI, donde se aglutina dentro de un mismo ecosistema a gran parte de estos agentes,  son una garantía de éxito para todos los clientes que depositan en ellos su confianza.

. ¿Qué elementos de sostenibilidad se implementarán en los proyectos que desarrollas con Coanfi?

La sostenibilidad es un concepto muy amplio y que afecta a todas las fases de la construcción, incluso antes de empezar la propia obra. A nosotros nos gusta dividirlo en tres bloques, implantación, construcción y uso.

Implantación: Se está trabajando en procesos de implantación en obra efectivos, para minimizar los plazos de ejecución de la obra y ,con ello, limitar todos los gastos indirectos, tanto económicos como medioambientales que ello conlleva.

Construcción: Se han buscado sistemas constructivos industrializados con menor impacto para el medioambiente. Todas las empresas con las que se colabora, en lo referente a aislamientos, carpinterías, tabiquería, acabados, etc., tienen sus sellos de certificación medioambiental, garantizándonos que durante todos los procesos se han contemplado actuaciones con un bajo impacto medio ambiental.

Uso: Todo el proceso acaba con la entrega de  las viviendas al usuario final. Los edificios se han pensado para que tengan una calificación energética tipo A, que es la más exigente de nuestra normativa, lo que garantiza un consumo muy bajo de energía, que se consigue con un correcto aislamiento y uso de métodos con un correcto aislamiento y la optimización de su desempeño bioclimático.

. Coanfi Residencial Magna, compuesto por 32 viviendas de 2, 3 y 4 dormitorios, ofrece opciones de personalización en sus estancias a los compradores. ¿Cuáles son las diferentes propuestas en lo que a distribución se refiere?

En Residencial Magna nos propusimos el reto de hacer la “vivienda flexible” permitiendo al comprador personalizarla a su gusto según su estilo de vida. En estos últimos años hemos visto una mayor demanda de los clientes en busca de espacios más abiertos, que puedan ser usados de formas distintas, dependiendo de la fase del día o incluso de la estación del año en la que nos encontremos.

En Residencial Magna se ha buscado este concepto y cada vivienda está dividida en 3 franjas, zona de noche, espacios servidores y zona de día. Esta última zona es la que se ha pensado de una forma flexible, permitiendo al usuario final elegir entre diferentes diseños de los elementos, pudiendo configurarla como un gran espacio único de trabajo, estar y cocina, o una concepción más clásica  con estancias compartimentadas.